Después de un día laboral agotador, lo único que deseamos es que venga nuestra hada madrina al auxilio y haga todas aquellas cosas que hacemos cuando llegamos cansadas a casa después de un día en el trabajo, bañar a los niños, preparar la cena, arreglar el cuarto o limpiar el baño que la señorita quien nos ayuda no lo hizo bien, poner la ropa sucia en la lavadora, ver si el jardín está limpio y si no a limpiarlo se ha dicho.
Todas estas cosas las hacemos primero y nos olvidamos de dar amor, probablemente diste un beso o un abrazo a tus hijos, probablemente los bañaste rápido para ir a ocuparte en otras tareas.
Solo quiero que te detengas un momento, tan solo un instante y pienses en ti, porque tu eres importante y eres pilar , sostén de una familia, y cuando saltamos muy alto no vemos lo que pasa a nuestro alrededor, todo se torna normal incluso la falta de atención por parte tuya a tus hijos.
Si queremos aprender a jugar con los hijos debemos liberarnos, debemos dejar todas las preocupaciones y ocupaciones y dedicar verdaderamente ese tiempo de calidad a los niños.
Los niños saben, sienten cuando uno físicamente está pero mentalmente se encuentra entre las paredes de los problemas de la casa, del trabajo, o problema familiar de cualquier índole.
Necesitamos vivir el presente, disfrutarlo mas que nada, porque eso es lo valioso, el pasado ya fue, el mañana no sabemos que habrá, el hoy, el ahora es el momento oportuno de alegrarnos y sentirnos vivos.
Se dice que los niños son alegría y felicidad, entonces aprendamos de ellos compartiendo sus juegos, dándole el tiempo que se merecen y dedicándonos a ellos con todo nuestro ser.
Esta es la terapia más beneficiosa que la he comprobado, simplemente jugando con mi hija, volviéndome alegre, viva y con entusiasmo.
Entonces que esperas? a jugar que es divertido!!!
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