Trabajar es una función esencial en nuestras vidas, sin el trabajo nuestro desarrollo personal y profesional quedaría muy retrasado y nuestra vida en general carecería de un sentido de responsabilidad y aprecio por una misma, porque el trabajo ennoblece, sana y motiva.
Y estoy hablando de un trabajo que ames hacerlo, no aquel en que trabajas 8 horas, te levantas temprano, casi sin mirar a tus hijos sales corriendo de la casa para poder llegar muy puntual a tu trabajo, para sentirte miserable en él, como culpando al mundo de aquello que haces ahora y que no te gusta.
El verdadero trabajo es aquel que se hace con AMOR, como dice Paulo Coelho, todo trabajo debe ser una ofrenda y dicha ofrenda debe ser realizada con amor porque sino no sirve.
Cuando nos encontramos en una situación en que no nos gusta lo que hacemos simplemente estamos negando o reprimiéndonos a nosotros mismos, acaso no eres lo suficientemente capaz de hacer y vivir de eso que te gusta realmente? podrías tener el coraje de renunciar a tu empleo y hacer lo que verdaderamente te apasiona?
¿Es difícil tomar esa decisión?, la verdad no, solo te tomará un segundo decidir, lo difícil será mantenerte en esa decisión , persistir, insistir y no desistir, esa es la cuestión que te llevará más tiempo, y requerirá de mucha fuerza de voluntad, seguridad en ti misma y mucha disciplina.
Una madre que trabaja lo hace generalmente por necesidad, a la mayoría le gustaría quedarse en sus casas a cuidar a sus hijos, lo cual es una buena idea pero solo temporalmente hasta que el bebé este ya grandecito, porque recuerda tu también tienes el derecho de crecer personal y profesionalmente.
Hay muchos tipos de trabajo que se pueden hacer desde la casa cuando por ejemplo tienes hijos chicos, podrías aprender manualidades, arte, moda, accesorios, carteras, etc., lo importante es mantener tu mente en evolución constante, o sea aprendiendo siempre algo nuevo, porque gracias a esa creatividad te irán surgiendo ideas de las buenas y podrás definir aquello que verdaderamente te apasiona si es que aún no lo sabes.
Por ello el primer paso para hacer tu trabajo con amor es identificar que es lo que más te apasiona hacer, y si eso lo harías aún si no te pagaran por ello. Cuando al fin hayas encontrado eso, sabrás que tu trabajo lo harás siempre con empeño y amor, será un regalo, un servicio para los demás, te sentirás útil, y plenamente feliz.
Entonces te pregunto, ¿estás haciendo tu trabajo con AMOR?
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